Henri Matisse

Le Cateau-Cambrésis, 1869 – Niza, 1954

Henri Matisse nació el 31 de diciembre de 1869 en Le Cateau-Cambrésis, una pequeña ciudad en el norte de Francia. Inicialmente, Matisse no tenía intenciones de convertirse en artista, estudió derecho en París y trabajó como administrador de un despacho de abogados. Sin embargo, en 1889 lo abandono para descubrir la pintura y decidió dedicarse al arte. En 1891, Matisse se mudó a París para estudiar arte formalmente en la Académie Julian y más tarde en la Escuela de Bellas Artes, donde fue alumno de Gustave Moreau y en 1895 paso a ser miembro de su taller. Durante sus primeros años, experimentó con una variedad de estilos y técnicas, incluidas las influencias del impresionismo y el puntillismo. Pero fue en 1905, durante una exposición en el “Salon d’Automne”, donde Matisse y un grupo de artistas, incluidos André Derain y Maurice de Vlaminck, se dieron a conocer como los «Fauves» debido a su uso contrastado del color, las formas simplificadas y la influencia de la estructura africana. A lo largo de su carrera, Matisse continuó evolucionando y explorando nuevas técnicas y medios. En la década de 1910, se trasladó a un estilo más estructurado y geométrico, influenciado en parte por el cubismo. Durante la década de 1920, Matisse vivió en Niza, donde sus pinturas se volvieron más serenas y decorativas, reflejando la luz y el color del Mediterráneo. En la década de 1940, Matisse comenzó a experimentar con una técnica que se convertiría en su sello distintivo: el recorte de papel pintado, o «papiers découpés». Este método, que él llamó «dibujar con tijeras», le permitió crear composiciones vibrantes y dinámicas, a pesar de su salud debilitada. Obras destacadas de este período son «La Tristesse du Roi» (1952) y «El caracol» (1953). Finalmente, Henri Matisse murió el 3 de noviembre de 1954 en Niza, Francia, a la edad de 84 años.